Pollo asado con Manzanas especiadas

Los que nos hayáis visitado antes ya sabéis que nos encanta mezclar sabores y la mezcla dulce-salado es de nuestras favoritas. No sólo por el juego de matices, sino porque facilita que los malos comedores coman cosas que de normal no se atreverían.

Una forma genial de aportar ese punto dulce sin aportar azúcares vacíos o innecesarios es a través de las frutas. Las cuales aportan color, sabor y aroma a las recetas, además de vistosidad y atractivo a la hora de servirlas.

En este caso hemos mezclado dos recetas de horno muy tradicionales, el pollo y la manzana asados. Ricos por separados y deliciosos unidos.

Para reducir el aporte de sal de la receta, como siempre, hacemos buen uso de las especias.

La variedad de manzana a escoger va a gustos, dependiendo de si os gusta un toque más ácido o una textura más arenosa. Nosotros en esta ocasión usamos las Gala porque eran las que teníamos en casa, pero solemos usar la Golden que es más apta para horneado y no se desvanece tanto su sabor.

Recomendamos el consumo de pollo casero o de corral por la jugosidad y sabor, la naturalidad de su cría y la calidad de su carne. Pero que cada casa se amolde a su presupuesto y gusto ^_^

También os recordamos que es mejor comprar el pollo entero y trocearlo en casa, consumiéndolo el mismo día de su compra.

Ale, vamos al lío...

Ingredientes (para 4 personas aprox.):

- 1 pollo de unos 1600 g de peso
- 4 manzanas
- zumo de limón
- 100 ml de vino blanco o Mistela
- 500 ml de caldo casero de pollo
- nuez moscada
- clavo
- canela
- pimienta negra
- aceite de oliva virgen extra
- sal

Preparación:

1. Precalentamos el horno por arriba y abajo a unos 200ºC, depende de la potencia real de vuestro horno. Un buen truquito es comprarse un termómetro interno para horno, es muy práctico y se vende en ferreterías y especialistas en utensilios de cocina.

2. Disponemos en una fuente para horno el pollo limpio. Masajeamos con aceite su piel  y lo salpimentamos. Cubrimos el fondo de la fuente con un poco de caldo casero de pollo, con un vaso suele bastar.

3. Lavamos bien las manzanas, les quitamos el corazón (¡viva el descorazonador!), cortamos en rodajas de 1 cm de grosor y rociamos con zumo de limón para que no se oxiden. Si las queréis bien blanditas, las incorporamos ya a la fuente con el pollo.

4. Introducimos el pollo en el horno, bajamos la temperatura a 180ºC y dejamos hornear durante 30 minutos bañando de vez en cuando el pollo con el jugo.

5. Pasados los 30 minutos le damos la vuelta al pollo y si querías las manzanas más enteras, se las añadimos ahora. Las sazonamos con las especias y añadimos el otro vasito de caldo. Dejamos cocinar 20 minutos más.

6. Transcurridos los 20 minutos volvemos a darle la vuelta al pollo, rociamos con el vino blanco y dejamos hornear los últimos 10 minutos a 200ºC.

7. Terminado el tiempo de horneado, comprobamos que la carne está en su punto y de ser así dejamos reposar fuera del horno.

8. Servimos acompañado de una buena ensalada, verduras salteadas y algún hidrato de carbono, como arroz, pasta, patatas o un buen trozo de pan.

9. Comemos y a disfrutar ^_^

Trucos y Sugerencias:

- Recordad que cada horno es un mundo y cada gusto más. En nuestro caso, cocinándolo así nos queda el pollo jugoso y dorado por fuera. Las manzanas tiernas pero enteras y caramelizadas (las ponemos a mitad o final de horneado). Y la salsa ligera pero sabrosa.

- Las especias y su cantidad son al gusto, pero os recomendamos que no os paséis para que las especias como el clavo no se queden con todo el protagonismo. Y tened en cuenta que al usar especias podemos reducir la cantidad de sal en la preparación sin que el sabor final mengüe.

Nos leemos pronto... ¡buenas cocinillas a todos! ^_^