Galletas "Bombón" de rooibos y coco
Como soy una loca del té y las infusiones y no me puedo estar quieta en la cocina, inicié la andadura COCINAR-TÉ y, después de las Magdalenas Bruja Explosiva, me puse a experimentar con una de mis infusiones favoritas. El Bombón de Teterum es una infusión de rooibos aromatizado con chips de coco, cáscaras de cacao y semillas de cacao molidas... mmmm es sólo pensarlo y venir el olor a la memoria.
La textura final de la galleta es crujiente por fuera pero jugosa por dentro. Además admiten diferentes coberturas y rellenos, dando mucho juego.
¿Que qué es el rooibos? El rooibos es una planta de origen sudafricano que se usa en infusiones y cocina. Se le denomina muchas veces té rooibos o té rojo, aunque no es un té. Eso sí, al igual que el té, tienes múltiples cualidades y beneficios. Pronto os haré una entrada más exhaustiva hablando del rooibos y todas sus propiedades.
En este caso quisimos potenciar el aroma a coco, pero la versión potenciando el cacao es también deliciosamente rica.
Ale, vamos al lío...
Ingredientes (para 20 galletas aprox.):
- 250 grs de harina de repostería
- 100 grs de azúcar moreno
- 125 grs de mantequilla sin sal
- 9 grs de impulsor químico
- 25 grs de coco rallado
- 1 huevo tamaño L
- 50 ml de leche
- 25-30 grs de infusión Bombón de Teterum (rooibos con coco y cacao)
Preparación:
1. Lo primero es hacer la infusión. Para ello calentaremos los 50 ml de leche sin que llegue a hervir, nosotros la tuvimos 30 segundos en el microondas. Incorporamos las hojas de rooibos aromatizadas, tapamos y dejamos reposar 8 minutos. Pasado ese tiempo, colamos la infusión.
2. En un bol grande tamizamos la harina, le añadimos el azúcar, el impulsor químico y el coco rallado. Mezclamos ligeramente y hacemos un hueco en el centro.
3. Cascamos un huevo en un cuenco y si está bien (recordad los consejos sobre la manipulación de huevos, leed aquí), lo vertemos en el hueco que hicimos en la mezcla del bol. Añadimos la mantequilla, que estará en punto de pomada, y la leche infusionada ya tibia.
4. Es hora de amasar hasta obtener una masa uniforme, húmeda pero que se despega con facilidad de las manos (nosotros estuvimos amasando unos 8 minutos), hacemos una bola y volvemos a meter en el bol, previamente enharinado. Tapamos con plástico film bien cerca de la masa, para que no salga costra, y guardamos en la nevera durante 1 o 2 horas, dependerá del calor ambiental. Queremos una textura más compacta para trabajar bien la masa a la hora de darle forma.
5. Una vez compactada la masa en la nevera, precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo. Sacamos la masa a la encimera enharinada, o donde solamos trabajar, y la estiramos con ayuda de un rodillo. Debemos dejarla uniforme y con un grosor no mayor a 1 cm.
6. Cortamos con la forma que más nos guste y vamos depositando las galletas sobre una fuente de horno en la que habremos puesto antes papel de hornear. Tendréis que dejar espacio entre galleta y galleta para que se cocinen bien y no se peguen.
7. Horneamos durante unos 10 minutos o hasta que empiecen a dorar los bordes. Sacamos la bandeja del horno, dejamos enfriar las galletas en la misma durante unos 10 minutos y luego las pasamos a una rejilla donde terminarán de enfriar.
8. Podemos servirlas una vez frías tal cual o con algún tipo de cobertura. Como bebida, nada mejor que una infusión Bombón, ¿no?
9. Comemos y a disfrutar ^_^
Trucos y Sugerencias:
- Como el rooibos no contiene teína, estas galletas pueden tomarlas los niños, además les encantará ayudarte a prepararlas y a decorarlas... bueno, y al menos en nuestro caso, a comérselas jajajaja
- Si queréis potenciar el sabor del rooibos, podéis incorporar un par de cucharadas de hojas de rooibos a la mezcla.
- Nosotros quisimos potenciar el sabor del coco, pero tú puedes potenciar el sabor del cacao añadiendo 1 o 2 cucharadas de cacao puro o trocitos de chocolate puro o blanco.
- Si sois golosos, podéis cubrirlas con glaseado, mermelada, caramelo de coco, chocolate fundido... Personalmente os recomiendo que si queréis ponerle algo por encima, no sea taparlas totalmente, que sea sólo en hilillos. En la próxima hornada les haré fotos con diferentes versiones, no os preocupéis.
- También podéis rellenarlas, bien poniendo los trocitos de chocolate que os comentaba o metiendo una onza por debajo de cada galleta justo antes de hornearlas. Si las hacéis finitas podéis hacer como un sándwich para poner en su interior el relleno que más os guste.
- Para conservarlos durante 4 o 5 días, podéis hacerlo metiéndolas en una lata hermética clásica para galletas.
Nos leemos pronto... ¡buenas cocinillas a todos! ^_^
Ummm que pinta mas buena. Ya cogere a mis nietos que no me han dejado ni una.
ResponderEliminarJajaja pobrecillos, no tuvieron mala intención jajajaja Ya os haré una hornada ^_^
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